Nació un día de lluvia (este evento seria recordado por todos y para siempre, ya que se produjo en muchas zonas del país grandisimas inundaciones, y esto genero grandes emigraciones), ya el cielo anticipaba su llegada.
Desde chico se intereso por los juegos de mesa, de Carlos Mesa, un amigo de la familia.
Mas tarde o al día siguiente, se acordó que tenia que ir a comprar batatas. Es ahí donde empieza su aventura.
Fanático por los aviones y todo lo que tenga que ver con ellos, como también de las naves espaciales, decidió hacer un gran viaje fuera de su país, pero en ferrocarril.
Amante de las historietas, ya desde chico siempre se inventaba alguna.
Con el tiempo se instalo en un lugar donde le fue casi imposible salir, Max se encontraba pisando cemento fresco. Al poco tiempo de salir, pudo casarse y tener hijos (Este suceso marcaría toda su vida, puesto a que entre las anécdotas que cuenta, al final, el cemento no era tan desagradable).
Ayudante de bombero, pasó por varias tragedias, pero la más importante de su vida fue “el tornado de Tartagal”, donde Max salio a prestar declaraciones en una conferencia que fue pasada por televisión, y dijo:
- “Este hecho es de una gran magnitud, es una inmensa tragedia de la cual estamos apenados. Lamentamos no tener mas dotaciones de bomberos para poder ayudar a la gente que lo necesita”.
Y al final agrego: “En realidad todo esto se parece “al día después de mañana”, por eso, ¡ya no nos preocupamos tanto!..., porque ya nos pusimos en contacto con Dennis Quaid para que nos venga a rescatar a todos”. A la media hora, Max fue despedido.
Pero la gente todavía lo recuerda con cariño y mucha alegría, siempre con una sonrisa, y cada vez que lo ven en la calle, automáticamente lo reconocen y comienzan a reírse.
En la actualidad trabaja dentro de la Bolsa de Mercado (Central).
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